Los domingos me pongo triste, triste el aire, la comida, el sol, la lluvia ,todo.
La mirada cansada, el cuarto con olor a medicina, el aire tenso.
Las palabras, tímidas, se esconden. Mis manos no saben que hacer, entonces cuelgan inertes de mis brazos.
Ahora ella es solo ojos, unos ojos grandes, que se parecen a los mios. Ella es solo su esencia, su presencia, su valor. Su cuerpo está debil y pequeño. Su sonrisa es dificil pero ahi está.
Me atranganto con las lagrimas...
¿Hasta cuando?'
